Buscando diversión (Libre) (solo mayores)

Recuerdo del primer mensaje :

<Este post contiene escenas adultas, solo mayores podran verlo>

"Que mierda es esto, no hay nada interesante ni en esta parte de la ciudad. Vengo en busca de diversión y nisiquiera un perro al cual patear. Bah." -Kagura va caminando mirando a todas partes, en busca de algún objeto para diversión propia. Cual quier cosa que le quitase lo aburrido. Traía en un estuche negro su guitarra, la cual la traé colgado de lado por la espalda, en su mano izquierda cargaba un amplificador no muy grande; con la mano derecha sostenía un cigarro, el cual hiba fumandolo. "Quiero algo bueno. O quizá termine totalmente aburrido de este lugar y me cambie una vez más. ¡JAJAJAJAJAJAJAJAJAJA!" -reía como maníatico imaginando que a la hora de irse encendía parte de la ciudad.-

"No es mala idea. Al contrario, muy buena. Quizá algún edificio de gobierno" -exlaba el humo de su cigarro hacía la izquierda, tranquilo. Un pequeño gato se le cruzó en el camino, el solo se limitó a mirarle con arrogansia "Estúpido gato maricón. No sé por que yo mismo me comparo con hegendros como ustedes, animales infernales" -estaba a punto de patear al gato con sus botas largas y de casquete de metal en la punta cuando sus ojos se posaron en una pequeña caja a su derecha, una cajita de carton destruyendose, mojada por la lluvia, con muchos pequeños gatitos dentro de ella. Maullaban con desespero, al parecer tenían muchisima hambre. Kagura desistió de patear al gato, ya que, asumió que era parte de esa 'familia'- "Menuda coincidencia. Los animales tiene más sentimientos que las personas de mierda de esta sociedad."

Aún cuando miró como se vino la chica el seguía. El aún no llegaba, ya que, era un tanto tardado, pero no le faltaba tanto. Más, no dejaría a medias las cosas asta que la chica se viniera una vez más. La tomó con fuerza y la llevó hacía la cama. La puso boca abajo y siguió embistiendola con fuerza. Mientras le lamía el cuello y seguía mordiendoselo. - "Vaya que eres espectacular." -lde dijo con una voz totalmente cargada de sensualidad. Por su espalda sentía un calor que le recorría desde la planta de los piés asta su cabeza, por todo y cada parte de su cuerpo. De vez en cuando suspiraba un tanto de placer. El sudor recorría desde su cara, su pecho y su bien formado adomen, pasando por el ombligo y terminando donde devía, nás, los movimientos que hacía a veces terminaban por dejar caer el sudor al suelo. Su cabello estaba mojado por el mismo, esparsido a su alrededor y pegado a su cuerpo. Su mirada era calida y apasionada, mientras que tenía la boca entre abierta.